domingo, 19 de marzo de 2017

Mirada color azul


18 de Marzo del 2017


Solía recurrir a los tristes recuerdos de un pasado que lo único que logro dejar fueron cenizas que con el tiempo, fueron esparcidas por el viento sin siquiera dejar rastros, aprendí que en muchos casos lo mejor era ocultarme tras la pared de la indiferencia, el sonreír se iba haciendo difícil y el salir de ese cuarto lóbrego era toda una aventura que en muchos casos no estaba dispuesto a vivir.
Buscando una salida, buscando un recurso para acabar con aquello que me atrapaba y no me dejaba respirar, busque una amistad la cual estaba a miles de kilómetros de distancia, siendo un completo desconocido te escribí y espere a que algún día lograras responderme.
Así fue después de unos días recibí respuesta, no sabía que decir ni siquiera en que idioma escribir… ahí estábamos hablado… varias veces repetía las mismas preguntas, sí lo asumo mi vocabulario no era muy amplio, quizás escaso sería lo correcto. Pasaron los meses y realmente sí, aun sigo siendo un desconocido, un extraño que quiere hacer lo posible para dejar de serlo.


Minutos y hasta horas estuve esperando hasta que el celular dio señal de alarma, tú me habías escrito, después de varios meses conversando solo por mensajes, al fin pudimos vernos, pude ver tu sonrisa viva y serena, tus ojos profundos como el mar y llenos de alegría. Mi inglés aunque pobre estaba lleno de optimismo para poder forjar una buena conversación contigo, las palabras no salían, sí… Seguro eran los nervios. Me podría haber amanecido simplemente conversando contigo, talvez de la vida, talvez de los planes, talvez de ti o quizás de mi.


martes, 21 de junio de 2016

Amiga te Agradezco...

20 de Junio del 2016

Que mal ¿no?, tengo que dedicarte un tiempo dentro de mis recuerdos, dentro de mis memorias debo dejarte un espacio para que puedas hacerme sonreír de vez en cuando, olvidando un poco así el ruido de la ciudad, el tumulto de problemas y el vacío de la soledad. Debo dedicarle quizás un par de minutos a aquello que algún día fue lo que hoy no existe. Dedicar un par de segundos seria una injusticia siendo que fuiste una amiga incomparable, viajera, comprensible, risueña y hasta juguetona. Ahora pensando por las aventuras que vivimos, seria un castigo pensar que habíamos prometido vivir mas momentos juntos, esto me suele recordar a aquella amistad que algún momento las circunstancias de la vida me arrebataron a mi primera amiga de verdad, esta vez, un tanto diferente por que junto a ti compartía algo mucho mas que una amistad, esto era ya que compartíamos juntos un futuro, un futuro de sonrisas y alegrías, aunque de vez en cuando se opacaba con una que otra situación desagradable…
Te escribo ahora como amigo, como aquel amigo olvidado, aquel amigo que posiblemente dentro de tu mente ya no es un amigo si no que simplemente es un ser viviente y nada mas que eso, te escribo como aquel que ha dejado aquel futuro juntos por permitir que pudieras sonreír una vez mas, pero esta vez lejos de mi, creo que eso sería lo mejor… Después de todo ya me acostumbro poco a poco a ser feliz detrás de cada sonrisa que se te escapa.
Si mi trabajo fuera el de colocar una estrella cada vez que tus recuerdos me traen sonrisas, podría llenar un cielo lleno de diversas constelaciones, es que fácil es seguir mirando lo lindo de la vida, cuando lo oscuro de esta misma no logra opacar los rayos de esperanza que vienen de vez en cuando mientras uno observa ese baúl de recuerdos que dejaste y aun no vienes a buscar.
Es que amiga como tu dudo que encontraría, que aun estando enojada, con sus disgustos logras enseñarme a vivir de otra manera pero sin ti, incomparable fue el haberte conocido y aun que no te pueda hablar por que el daño ya es tan profundo, quiero recordarte una vez mas para poder agradecerte siquiera a través de mis pensamientos, lo maravillosa que fuiste, lo humilde que lograste ser y lo lejos que pudiste volar, hasta llegar a un lugar donde a mi parecer me es difícil llegar.

Un gracias enorme a aquella la única amiga que aunque ya no este se que me seguirá comprendiendo con el mismo dolor que yo la comprendo en esta situación.

jueves, 12 de mayo de 2016

Carta a Dios N°12



12 de Mayo del 2016


Dios te escribo porque ya no sé qué más hacer intente solucionar los problemas por mi propia cuenta y no lo conseguí. Trate de pedir perdón mil veces y me di cuenta que cuando algo se quiebra es imposible restaurarlo… Créeme lo intenté, hice todo lo posible para que no fuera así, pero ya no se puede, por lo menos para mí todo está perdido, tu sabes lo que sucedió, sabes en que me equivoque y como lo hice, pensando que caminaba cerca de ti lo único que hacía era alejarme cada vez mas de tu presencia, el mundo se derrumbó frente a mis narices y todo sucedió tan rápido que no me dio tiempo para voltear y retroceder al punto de partida. Aquellos que consideraba como amigos y hermanos se han marchado, algunos desarrollan sus labores como si no ocurriera nada nuevo, incluso ya ni saludan como lo hacían antes, será que es porque ya no poseo un cargo de importancia y que simplemente todo lo que viví fue una amistad por intereses. Mientras tanto otro grupo que quizás esos si se les puede decir amigos, me saludan y piensan que todo está bien, sin darse cuenta que dentro hay un corazón muerto, lleno de angustia, pesar y que de vez en cuando necesita un abrazo sin ninguna pregunta de por medio. No creo que sea lo mejor contarles porque estoy así, ya cometí el error de contarle uno de mis problemas a parte de ellos y bueno… Ya no están a mi lado, quizás debe ser porque puedo llegar hacer una mala influencia para ellos o simplemente en su momento se acercaron para simplemente saber cuál era el chisme, ahora es cuando me doy cuenta lo que tu dijiste tantas veces: “Maldito el hombre que confía en el hombre”, y ¡sí! bueno devuelta me volví a equivocar en eso, consideré más importante una amistad con el mundo antes de considerarte a ti como el mejor de todos los amigos, disculpa… Quizás ahora estas un poco dolido porque durante tanto tiempo intentaste ser mi amigo y yo simplemente te hice a un lado o tal vez estás enojado porque me  tape mil veces los oídos para no escuchar tu voz cuando debí hacerlo, aahh… es que esta vida da tantas vueltas ¿no? Y bueno yo creo que me estoy mareando tantas vueltas, eso de vez en cuando me cansa, porque voy perdiendo el sentido de esta vida, será que es por el dolor que siento o son solo caprichos míos… Eso no lo logro distinguir, es que ya ni siquiera me conozco, o quizás si se quién soy una persona egoísta, envidiosa, celosa, impulsiva, soberbia, orgullosa y bueno en definitiva a veces me miro en el espejo y veo un monstruo, sí y eso sin contar mi apariencia física. Miro hacia atrás y no puedo creer todo el daño que cause, cuántas vidas destruí y yo seguí como si nada pasara a mi alrededor, bien ciego que estaba ¿no? Bueno ahora miro mi presente y es algo nostálgico, solo e incomprendido. A veces me pregunto incluso si oyes mis oraciones, o si estás ahí cuando estoy llorando, si para algunos suena algo loco pensar eso, pero yo lo pienso porque aún no se siquiera si estoy cerca de ti o estoy más lejos que antes. Es por eso que te escribo porque quizás esta carta puede llevar a un lugar más lejano a donde si podrás leerla, no se quizás son pensamientos de niño, pasa que cuando era pequeño a mi parecer era más inofensivo y vulnerable, es así como me siento ahora, como un niño que pide ayuda a su padre esperando que este le ayude. No sé si estoy demasiado ciego que no veo las maneras en que me quieres ayudar o realmente me perdí y estoy en el lugar equivocado. Aahh… sabes que se me olvidaba mencionarte, creo que mi familia está un poco enojada conmigo, bueno por lo menos mi hermano y mi papa, piensan que es una tontería lo que me pasa que son puros caprichos, que mujeres hay un montón, haay… si tan solo supieran cual es el real problema quizás me entenderían un poco por qué ya no sonrío como antes o el de porque ya no encuentro motivación en lo que hago. Mientras que mi madre y mi hermana puedo sentir que están mal por mi culpa, mi madre por su parte porque no entiende lo que me está pasando y por qué estoy así y bueno… mi hermana ya sabe que es lo que sucedió pero le duele mucho verme mal.
 
Financieramente sí que estoy en la quiebra, cero dinero para continuar estudiando, cuando llegue esté año acá a la universidad dije: ¡Que Genial estar de vuelta por acá! Ahora me doy cuenta que todo es dinero, y a veces hasta llego a pensar que el dinero si hace la felicidad, porque sinceramente con el puedes tenerlo todo o casi todo, quédate tranquilo sí, que son solo algunas veces que pienso eso, en especial cuando me desespero, es que ¿Sabes? A veces me gustaría tener dinero para pagar la carrera y ayudar a mamá a estar más tranquila, arreglarle un poco la casa o comprarle una parcela en el campo y hacerle una casita para que pueda estar más tranquila, también le pagaría los estudios a aquellos que he visto y sé que no tienen absolutamente nada para mantenerse. Pero bueno… no es así esos son solo sueños o pensamientos que me vienen de vez en cuando, la realidad es que no tengo nada, ni siquiera sé si podré seguir estudiando el segundo cuatrimestre en la universidad, ya que la ayuda que supuestamente me iban a dar no la he visto, quizás fue solo algo que me dijeron para que me quede tranquilo por un momento, para luego decirme que no se podría, bueno, no me quiero adelantar a eso, pero es lo que pienso, además me dijeron que académicamente me tenía que ir excelente para poder conseguir una ayuda y en realidad me cuesta bastante, por más que leo no me entra todo, creo que soy un poco torpe para estudiar o quizás flojo, lo único que pasa es que muchas veces mi cabeza quiere estallar, tal vez son escusas y aun no me doy cuenta de eso, es ahí cuando me miro y me pregunto todos los días ¿Será que realmente quieres que sea Médico? O tal vez estoy aquí simplemente porque yo lo quise y no por que estuvo dentro de tus planes, no sé qué pensar, a veces quisiera tener la sabiduría e inteligencia que tú le concediste a Salomón, e incluso te la pido, pero más torpe y tonto me siento. Mi padres y mis hermanos piensan que soy inteligente, lo cierto es que yo no me veo así, solo soy del montón de aquel montón que realmente es muchas veces incapaz simplemente porque sus capacidades no permiten ser algo más.
 
¿Sabes? Me acordé de cuando fui a colportar por primera vez, que rayos hacia ahí ¿no? Paciencia le diste al líder para que no me echara, porque realmente era muy desordenado y flojo. Aún recuerdo como termine ese verano, contento, porque no sabía cómo había sobrevivido a tal travesía, solo tenía una idea en la cabeza es que debía volver a repetirlo una vez más, y así fue… Colporté varias campañas más conocí a gente maravillosa, pase experiencias inolvidables, eso debe ser porque tenía la llama de ser misionero dentro de mi corazón, ahora miro hacia aquellos tiempos y me doy lástima porque ya no siento lo mismo, ya no tengo la motivación de antes de ser un misionero, quizás será por el momento en que estoy pasando, deje un cargo que me gustaba simplemente porque me dijeron que sería más fácil recibir una ayuda económica así, y bueno… Aún estoy esperándola, ¿Sabes? A veces pienso que en realidad fueron puras mentiras y si… las creí que tonto ¿no? Todo eso en fin me hace alejarme cada vez más de lo que en algún momento me apasionaba que era el ser misionero, hasta había incorporado un lema a mi vida! “Seremos misioneros o no seremos nada”, que momentos aquellos ¿cierto? Eran momentos en los cuales había mucha gente a mi alrededor y si era simplemente gente, porque cuando sales de ese círculo, prácticamente nadie te toma en cuenta y claro… aquí estoy yo fuera de ese círculo, ya sabrás como…
 
Pienso que tendría que contarte un poco de lo de ayer, ya iban varios días en los cuales estaba luchando para sentirme bien, te gritaba, te lloraba, te clamaba para que me dieras una respuesta, no te echo la culpa de seguro fui yo el que estaba tan lejos que no pude oír, bueno terminado el culto la vi con otro chico, sinceramente se me partió el corazón, al ver como lo miraba, como le sonreía y como le hablaba. Extrañe esos momentos, y más aún porque estaba sentado solo… al terminar el culto quería conversar con ella, había pasado un tiempo de la última vez que no conversábamos y bueno todo había quedado mal, seguro nos viste discutiendo ese día…Pero bueno, esta vez no quería eso, simplemente quería quedar en paz, le pedí conversar y pude ver en ella que simplemente no quería, le pedí que por favor me entendiera, que me costaba el verla bien mientras yo no conseguía siquiera dormir, no sé si fue ilusión mía o no pero sus ojos estuvieron por un tiempo brillantes, ella guardo silencio… Después de conversar un poco, le pregunte si estaba pasando algo con aquel chico, y me respondió que se estaban conociendo, lo único que se me cruzo por la cabeza fue que quería conocerlo para algo más, tuve miedo… ahí estaba aquella la que alguna vez fue mi confidente, mi amiga, mi compañera. Pude sentir el frio de la soledad abrazándome una vez más y comprendí una vez más que para mí era imposible  restaurar lo que en algún momento se había quebrado, en ese momento mi impulsividad me ganó, le dije que le contaría el problema a aquel, ella se enojó y quería irse, mi desesperación me estaba ganando, no sabía qué hacer, mientras más la miraba me daban ganas de abrazarla, llorar junto a ella, pedirle perdón y decirle simplemente que me escuche solo un momento más. Ya estaba cansada, no era la primera vez, me dijo que tenía miedo de mí, ahí fue que comprendí lo terrible que puede ser una persona que está lejos de ti. Le dije que no haría algo que le hiciera daño, después de todo tenía que aprender, ya le había hecho bastante daño. Sé que viste todo lo que ocurrió, viste el temor que sentía, viste cuando después de solucionar un poco eso la abracé y le dije al oído que me perdonara, pero sobretodo me había dolido muy profundamente el hecho de que me dijera que tenía miedo de mí, mientras me marchaba dijo mi nombre, no sé para qué, tuve la intensión de volver, pero realmente estaba pensando sobre la clase de persona en la que me convertí. Seguro me viste llorar en la noche y ¡si! Como no si te discutía cada cosa, te pedí que por favor acabaras conmigo, te roge que lo hicieras, después de todo dentro de mí solo hay maldad, una vez más sentí que no me escuchabas o quizás estabas sentado en aquella silla mirando como lloraba y te gritaba desde lo más profundo de mi ser.
 
Sinceramente no sé qué hacer, mi cuerpo no funciona bien, conciliar el sueño es un dilema, ando cansado tanto así que hacer mi culto es una lucha, amanezco triste, la medicación que me dieron por lo menos me ayuda en algo, aunque hambre suelo a veces ni tener. Tu sabes… tú me conoces, sabes mi levantar y mi acostar, sabes mis luchas, mis derrotas y mis victorias, sabes lo confundido que estoy en este momento y sabes que si tuviera algo que pedirte lo que te pediría es que pudieras restaurar aquello que en su momento quebré, porque yo fuerzas no tengo, mis ánimos se agotan, las ganas de vivir se van cada día y bueno… pude comprender que simplemente soy un ser humano que depende de tu misericordia para seguir viviendo. Eres el único que puede restaurar lo perdido, el único que puede transformar mi vida, el único que me entiende y el único al que puedo recurrir cuando veo que muchos me han dado la espalda.
 
Espero no estés enojado por todo lo que paso durante todo este tiempo, tan solo pido que puedas leer está carta y bueno, si tienes algo de tiempo en tu ocupada agenda, puedas contestarme, después de todo no es fácil mantener el universo entero, pero bueno eres Dios tu todo lo puedes…

PD: Espero te acuerdes de mi porque he estado tanto tiempo lejos de ti creyendo que estaba cerca que seguro quizás no me reconoces.

Atte. Kevin Vera Montecinos